Como abogados en Tenerife desde el despacho de Fernández Bethencourt Abogados contamos con la experiencia en todo lo relativo a seguros. Consideramos que es muy importante tener claros los conceptos que figuran en las pólizas contratadas para, en caso de accidente, lograr que la compañía aseguradora nos nos indemnice de la manera que corresponde.
Es obligatorio que las embarcaciones tengan un seguro de responsabilidad civil
Comenzamos señalando que los seguros de las embarcaciones de recreo están ideados para ser aplicados a las embarcaciones que tienen un uso particular. Puede tratarse de embarcaciones de recreo o deportivas. El seguro obligatorio tiene por objeto cubrir la responsabilidad civil derivada de los daños materiales y personales, así como perjuicios que sean consecuencia de ellos, que por culpa o negligencia se causen a terceros, al puerto o a las instalaciones marítimas, como consecuencia de colisión, abordaje y, con carácter general, por los demás hechos derivados del uso de embarcaciones en las aguas marítimas españolas, así como por los esquiadores y objetos que éstas remolquen en la mar.
Las coberturas mínimas de este tipo de seguros vienen claramente establecidas. Pero es importante destacar que si contratas las pólizas mínimas, solo cubren los daños que causemos a otras embarcaciones no los que sufra nuestra embarcación. También cubre, además de los daños materiales, los personales que podamos causar a terceros por culpa o negligencia.
También se pueden incluir determinadas cláusulas que incluyan algunos riesgos adicionales como por ejemplo los riesgos extraordinarios, provocados por fenómenos como terremotos, inundaciones, erupciones volcánicas, etc. O los accidentes personales.
Cómo actuar en caso de accidente
En el momento que se produce un accidente o siniestro con la embarcación que consideremos que puede ser cubierto por el seguro, el cliente deberá dar parte a la compañía aseguradora. Esta pedirá todo tipo de información sobre las causas que han provocado el suceso, las circunstancias en las que ocurrió el accidente y la documentación que considera necesaria. Si han participado terceros, se tienen que consignar también sus datos.
Una vez que tenga todos los datos y la documentación, la compañía aseguradora acordará con la persona responsable el envío de un perito que será el encargado de valorar los daños y los criterios que se establecen en el contrato. La compañía aseguradora puede asumir que tiene la obligación de indemnizar al cliente o, por el contrario, decidir que ese tipo de daño no está cubierto por el seguro contratado. En el primer caso, procederá a calcular la cuantía de la indemnización. En el segundo, la única opción que nos queda es acudir a la vía judicial.
También pueden surgir discrepancias en cuanto a la cantidad que se debe indemnizar. En este caso, es recomendable acudir a un especialista para que le asesore en todo el proceso.
Contar con la asesoría de abogados en Tenerife como Fernández Bethencourt Abogados, te ayudará a entender tus derechos, a saber todos los pasos que tienes que dar y a gestionar todo el proceso de manera mucho más rápida y eficaz
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